Por: jRous
Sobre, soñar no cuesta nada.
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Era una tarde hermosa de un día cualquiera; el cielo mostraba la intensidad del azul celeste, las nubes tan blancas como los copos de algodón. Mientras contemplaba las nubes, vi a lo lejos dos raudos y veloces aviones F16 de la Fuerza Aérea Colombiana. Miré como atravesaban a las blancas nubes de forma oblicua, prácticamente de medio lado. Pero, ante mis ojos, pasaron en cámara lenta, y muy cerca, tan cerca que pude apreciar el color "camuflado" de los aviones, hasta pude ver el casco del piloto que lucia el tricolor de nuestra bandera Colombiana.
- ¡¡Vaya!! Que extraordinaria visión tengo, me dije.
Seguí viendo los F16 hasta perderse en el horizonte. Mirando de nuevo al cielo, vi un par de estrellas muy brillantes que titilaban a plena luz del día. Bajando lentamente mi mirada, vi a lo lejos las verdes montañas bogotanas donde pude apreciar con claridad, allá en lo alto, la iglesia de Monserrate, y el gigantesco cruz en el cerro de Guadalupe, pero en realidad se trata de Jesús con los brazoz abierto.
Seguí bajando mi mirada, y ya en mi alrededor, vi el amplio panorama de la naturaleza, todo era belleza y color; el verdor de los árboles y sus zonas verdes, sus flores multicolores, el cantar de los pájaros. Hombres y mujeres sonrientes y felices, los niños correr y jugar con su balón.
Justo a mi lado derecho, muy al borde, estaba un hermoso y apacible lago azul, fiel reflejo de la intensidad del cielo, sus patos nadar, y sus aguas cristalinas que permitían ver los peces y las piedras del fondo del lago...
- ¿En donde estoy? ¿que sitio es este donde cabe tanta maravilla y belleza? ¿Qué lugar es este donde todo el mundo es feliz?
De la impresión de ver tanta belleza, me desperté. Sólo era un sueño, un lindo y hermoso sueño.
Al despertar, volví a la realidad. Estaba en mi habitación. Me dirigí a la ventana y miré al cielo, el azul celeste ya no era tan azul, como en mi sueño; las nubes brillaban y me resplandecían mis ojos, ya no eran tan blancos como los copos de algodon, como en mi sueño; escuché el "rugir" de un avión, no lo pude ver, el resplandor de las nubes me lo impidió verlo como aquellos veloces F16, como en mi sueño...
Veo "desfilar" a las personas por la calle, pero ya no veo con claridad sus caras, no sé si están sonrientes y felices como en mi sueño. Cerca de allí hay un pequeño parque, los árboles y sus járdines, ya no era tan verdes y coloridos como en mi sueño …
Todo lo que veo es sombrío: sombras, siluetas y palidez. Ya no hay nada bello y colorido, como en mi sueño, todo es grisáceo.
Me adentré de nuevo a mi habitación y me dije:
- Solo fue un sueño. Un lindo sueño.
Esta enfermedad de mis ojos, me hizo aterrizar y VER de nuevo mi cruda realidad.
- ¿Por qué, o para qué?
Si vieras con mis ojos, entenderías.
jRous.